jueves, 31 de mayo de 2012

Puig Cerverís

26 de Mayo del 2012

Llegamos sobre las diez al punto de salida, éste se encuentra a la salida del pequeño pueblo de Abella, al que se accede desde la carretera de Camprodón a Setcases, antes de llegar a Vilallonga de Ter, cogemos a mano izquierda, una carretera que lleva al enturonado pueblo de La Roca. Pasado éste, en pocos minutos llegamos a Abella, en la parte alta del pueblo tomamos una pista de cemento y cuando pasa a ser de tierra, pronto vemos una explanada en la que podemos dejar el coche.

A escasos metros de andar por la pista, vemos un camino a la derecha, marcado con pintura amarilla, hemos de seguir por él, hasta llegar a un punto en el que encontramos una alambrada de frente ( justo delante hay un mojón del MOPU con una cruz ), cruzamos la alambrada y nos internamos en el bosque de pinos.
No hay camino, la reseña que llevamos nosotros, dice de seguir los distintos mojones de piedra, pero creo que es más fácil subir recto unos trescientos metros y después ir a la izquierda hasta alcanzar a un claro herbado el cual subiremos dejando los árboles a la derecha.
 Podemos ver la Serra Cavallera y la subida a la pequeña cima de Sant Bernabé.
Segimos avanzando hasta una alambrada, este punto es conocido como Collada Fonda.
Pasada la alambrada hay una fuerte subida que nos lleva al Puig d´en Bullici.
Desde aquí podemos disfrutar de unas maravillosas vistas sobre la Serra Cavallera, la de Montgrony, el Pedraforca, Puig Cerverís, Balandrau, Puigmal, Costabona, Canigó, etc.
Continuamos rectos y llegamos al Puig de Montroig, en cuya cima hay un vértice geodésico.

Vemos frente a nosotros a poco mas de una hora de camino el Puig Cerverís, meta de nuestra excursión de hoy.
Pasamos por la collada de Meianell y en seguida encontramos una pista, que seguimos a la derecha unos doscientos metros y llegamos a la collada de Dalt de Meianell, aquí suele haber algún coche estacionado.
Hay un gran cartel informativo y unas  piedras cerrando el paso a los vehículos.
Nos queda superar la fuerte subida hasta la cima.

La cota del Puig Cerverís es de 2.209 mts.
Ya hace rato que empezó a llover aunque no es muy abundante se hace necesario el chubasquero.
Se oyen truenos no muy lejos, por lo que decidimos bajar de la cima por si acaso, no sin antes hacernos la foto con la cruz oxidada que culmina el Puig.


Vemos un rebaño de rebecos, nunca habíamos visto tantos juntos y nos ha hecho mucha gracia, verlos corretear a sus anchas, hemos hecho fotos, pero han salido francamente mal.



Comenzamos el regreso y pensamos que estaría bien hacerlo por otro sitio, pero no teníamos claro por donde. En la collada de Meianell vimos unas marcas de color naranja, que nos dispusimos a seguir pensando que irían a la Collada Verda, pero pronto las marcas desaparecieron y nosotros seguimos bajando sin camino barranco abajo.
Llegamos a una riera, la seguimos hasta que se encajona y no podemos continuar, por lo que subimos otra vez superando el gran desnivel.
Cuando retomamos el camino de ida,nos introdujimos en el bosque por otro lugar y nos desorientamos, anduvimos de un lado para otro, sin encontrar el camino, a todo esto se hacía de noche por lo que dificultaba mas la búsqueda. Por fín encontramos el sendero, donde estaba la piedra con la cruz amarilla, frente a la alambrada. Ahora el camino no tiene perdida y en poco rato llegamos a la explanada donde tenemos el coche.
Ahora tenemos claro que para bajar a la Collada Verda, hay que hacerlo por Pèl-De-Ca, que es un monte a la izquierda del Puig d´en Bullici, hay que seguir desde allí las alambradas. ¡Otro día lo haremos !.

¡ RUTA CON GRANDES VISTAS !

sábado, 19 de mayo de 2012

Albarca - Cabassers por la Serra Major

Llegamos al pequeño pueblo de Albarca poco después de las ocho de la mañana. Hay bastante niebla y la visibilidad es muy limitada.
Salimos de Albarca por la calle que se encara al Montsant, en cinco minutos llegamos al Pla de Hostalets, desde donde salen tres caminos, uno a la ermita de Sta. Magdalena, otro es el que va a Cornudella de Montsant, denominado de Llisera y el tercero, de frente hacia la Serra Major y la Roca Corbatera, este camino es el que cogemos subiendo por entre unas rocas de color rosado, muy curiosas.
Subimos a la Serra Major y pasamos por la Roca Corbatera, no podemos disfrutar de la panorámica que normalmente se divisa desde aquí. Seguimos por la cresta de la sierra, dejando barrancos a derecha e izquierda. También vamos pasando por los accesos a los diferentes graus, los cuales ya hemos pasado en otras ocasiones.
Después de dos horas encontramos la imagen de acero del Cristo de la Sang y en una media hora mas llegamos al Piló de Senyals y en otra media hora encontramos la Cogulla, que también conocemos de otras rutas.
Paramos a comer algo y seguimos nuestro camino.
Bajamos por entre unas rocas, dejamos a la izquierda un camino que va al grau de l´Escletxa, seguimos por la derecha, poco después bajamos por el barranco del Cinto y pasado éste tomamos la pista que va a la ermita de la Foia.


Estamos un rato por sus alrededores y continuamos la marcha a Cabassers, lugar que también conocemos de otras rutas.   
Regresamos de nuevo a Albarca por el mismo camino, ya que la ruta es lineal, pero como se ha disipado la niebla podemos disfrutar de las vistas que ésta nos a negado en la ida.
 Desde la Roca Corbatera, punto mas alto del Montsant, podemos admirar el pueblo de Cornudella, el pantano de Siurana, etc.,
 Llegamos de nuevo a Albarca después de una larga caminata, pero lo hemos pasado muy bien, siempre que venimos al Montsant nos sorprende gratamente.

 
                                   

miércoles, 16 de mayo de 2012

El Cogul y la Presó de Capolatell

12 de Mayo del 2012

Llegamos a la ermita de Sant Lleir sobre las 9:30, esta antigua ermita se encuentra en la Vall d´Ora.

Cruzamos el río por un viejo puente de piedra, junto a él hay un antiguo aserradero convertido en una especie de museo.Tomamos dirección a Can Pujol, masía a la que accedemos en unos diez minutos.
Aquí se incorpora un nuevo excursionista, es un perro de la masía que a pesar de intentar espantarlo, hacía caso omiso y nos siguió parte del camino, luego se incorporó otro, éste nos abandonó antes.
Por lo visto están acostumbrados a acompañar a los excursionistas que pasan por aquí-



Pasamos por la gran masía de Can Sola, justo al lado hay un estrecho camino a la izquierda que se interna en el bosque, el cual seguimos. Vamos siempre en constante subida. Llegamos a una pista, tomamos a la izquierda, en seguida encontramos Can l´Orriol, frente a ella hay un sendero que cogemos, pronto hallamos un cartel que nos indica a Busa por las Colladas a la derecha y por les escales recto. Seguimos recto, pasamos un desvío que va a la balma del Xalet, como la ruta es bastante larga decidimos no visitar dicha balma.

Después de un buen rato llegamos al grau de l´escala, hay que subir por una escalera metálica, aquí dijimos adiós al perro Chucky, que es como se llama el can.


Superada la escala hay unos peldaños reforzados con maderas y con un cable de asidero.



Llegamos a una explanada con una gran vista panorámica. Hay una senyera independentista.




En pocos minutos desde aquí se llega al Pla de Busa, extensa explanada verde circundada por enormes precipicios.



Nos decantamos unos metros a la derecha, obviamos unos hitos y palos señalizadores que van bordeando el precipicio. Atravesamos el prado dirección a la loma que tenemos en frente, al fondo a la izquierda vemos la masía "la Bertolina". Cuando llegamos a la cuerda de la sierra, vamos  siempre recto siguiendo el borde del precipicio.
Vemos desde aquí el pantano de la Llosa de Cavall, Sant Llorenç de Morunys y un sin fin de montañas, en la cumbre de alguna de ellas podemos observar como aún hay algo de nieve.


Después de caminar bastante rato por la cuerda de la montaña, con un calor asfixiante impropio para la época del año, llegamos al Cogul (1.526 m.), punto más alto de la ruta.

Bajamos un tramo y llegamos a un mirador y continuamos hacia la prisión da Capolatell.
Accedemos a ella por una pasarela, pues no hay otra forma.

Cuentan que aquí dejaban a los prisioneros franceses en la guerra con estos, levantaban la pasarela y no podían escapar por sitio alguno, está rodeada de grandes y verticales paredes de roca. Aquí disfrutando de la vista hicimos un alto para comer.

Retrocedemos hasta el mirador y tomamos el camino dirección al Rial de Busa, pasamos por delante de esta masía, después encontramos un camino a la ermita de Sant Cristófol, seguimos por la pista principal.
Llegamos a la Bertolina, seguimos caminando en la misma dirección, hay un tramo donde el camino se difumina, tomamos la pista que va al grau de Vilamala, continuamos bastante rato por ella, hasta llegar a la bifurcación, dejamos la pista principal y tomamos a la izquierda, vamos siguiendo unas marcas de color verde que nos lleva a la iglesia de Sant Pere de Graudescales superando una fuerte bajada.

Ya en el Pla de Busa había empezado a lloviznar, pero ahora nos sobrevino una tormenta con un fuerte aguacero, con granizos incluidos. Imprudentes de nosotros, como la previsión descartaba lluvia, dejamos los chubasqueros en casa y nos pusimos calados hasta los huesos, aunque al principio incluso lo agradecimos, por el calor que habíamos pasado durante todo el día, a medida que nos íbamos enfriando nos sentíamos bastante incómodos. El tramo de St. Pere a St. Lleir, lo hicimos bajo la lluvia, y no cantando precisamente, el camino parecía un río y hasta las botas se llenaron de agua. En fín otra aventura mas que contar.  A pesar de todo, es un itinerario muy bonito, con muchos alicientes.
! Ah, Antonia vío un enorme lagarto de color verde subiendo al Cogul !

                                                   

viernes, 11 de mayo de 2012

Balmas de Tavertet

5 de Mayo del 2012

Estacionamos a la entrada del pueblo y en seguida vemos las marcas amarillas que debemos seguir.
En pocos minutos llegamos a la riera, la cual cruzamos por el puente vell y seguimos hasta salir a la carretera. Andamos un tramo por la misma hasta encontrar un camino a la derecha, subimos por el bosque.



Llegamos al Sunyer de baix, que es una vieja masía derruida en mitad de la vegetación.


Seguimos subiendo hasta salir a una gran explanada herbada.


Tomamos la pista hacia la izquierda hasta llegar a Collsaplonera.

En el coll hay una bifurcación, vamos a la derecha por un camino que baja, tenemos que ir pendientes de no pasarnos un pequeño sendero que hay a la izquierda y que lleva al Puig de Perereda y al sombrero d´en Perereda. Hay un hito señalando el camino.

Después de disfrutar de las vistas seguimos por el sendero que ahora se introduce en una zona casi invadida por la maleza, lo mejor es tener la pared rocosa como referencia.


Llegamos a la Balma de las Picas, llamadas así por haber en ella tres picas, las cuales se mantienen con agua gracia a unas gotas que caen del techo. Según cuenta la leyenda este lugar fue habitado por el famoso bandolera Joan Serrallonga en el siglo XVII.
Salimos de nuevo a Collsaplonera y cogemos la pista a la derecha, hasta la carretera.
Caminamos unos metros a la izquierda para asomarnos al Mirador y de nuevo tomamos la carretera dirección a Sta. María de Corcó.
Frente al Pla de la Perereda está el camino que debemos coger a la izquierda, poco antes de llegar al kilómetro 8.
Seguimos este camino hasta llegar a una bifurcación, vamos a la derecha al que llaman Morro de l´Abella.
Es una roca saliente en un precipicio enorme, la vista es fantástica.
                Retrocedemos hasta la bifurcación y tomamos el otro camino, siguiendo las marcas amarillas. A l poco rato hay otra bifurcación marcada con puntos amarillas la cual obviamos y seguimos hasta bajar al río.
En el río desaparece la marca y no vemos camino por el que seguir, por lo tanto tenemos que retroceder hasta el cruce donde está el camino marcado con el punto amarillo.     


 Este sendero va bordeando todo el barranco por una estrecha faja, a veces un tanto peligrosa.


Llegamos a un punto donde hay dispuestas una escaleras metálicas para poder salvar el desnivel.

Pasamos por un número elevado de balmas que forman las enormes rocas que tenemos sobre nuestras cabezas.



Casi llegando al circo que hay al final del barranco, hay un camino que sube, lo obviamos, poco mas tarde hay otro que baja ( presumiblemente al fondo del barranco, para ver la cascada desde abajo). Nosotros seguimos el punto amarillo, que nos lleva justo al salto del Molí Bernat por una estrecha faja a media altura.
No baja mucha agua pero el sitiom es espectacular, nos hubiera gustado verlo con mas caudal.
Seguimos el camino, ahora en constante subida por medio del bosque hasta llegar a Tavertet.
Hemos pasado un día genial. Hemos pasado por la oficina de información y hemos pedido consejo sobre posibles rutas, nos han atendido muy amablemente y hemos coseguido otros itinerarios que sin duda haremos puesto que el Collsacabra nos deleita.