Hostalets d´en Bas - Collsacabra pel Grau d´Olot

12 de Octubre del 2013

Comenzamos la ruta en el encantador pueblecito de Hostalets d´en Bas, se le conoce con el sobrenombre de la Suiza Catalana.
Después de hacer algunas fotos de sus bonitas calles, salimos de él, por la izquierda de la iglesia, según la encontramos de frente.

Vamos por una pequeña carretera, sin tráfico alguno. Pronto llegamos a Mas Curadas, preciosa masia antigua.

Continuamos hasta llegar a otra gran masía y nos encaminamos a la ermita de Sant Simplici, está tocando la carretera, luego, desandamos un tramo y tomamos por la pista sin asfaltar que habíamos dejado a la derecha y que coincide con el Camino de Santiago.

Pasamos por el Molí Vell y cerca de él, pasada una casa rural, nos desviamos a la derecha por el Camí Real de Olot a Vic, el camino está empedrado y es uno de los mejor conservados que he visto.
A la izquierda del camino hallamos la Font de les Marrades, en un lugar muy sombrío y húmedo.
En pocos minutos encontramos un pequeño sendero a mano izquierda, lo seguimos y pronto estamos en la denominada Mina dels Bandolers, las paredes forman un corte natural de unos 60 metros de largo. Regresamos de nuevo al Camí Real y seguimos subiendo hasta llegar al Hostal, enorme caserón cargado de historia.

Vamos siguiendo, cerca del precipicio, cruzando algunos ríos y torrentes, que mas tarde caen formando espectaculares saltos de agua, como el de Bertrans o el de la Coromina. El de Bertrans hay que tener cuidado de no pasarlo de largo. El de la Coromina aunque lo dejemos atrás, poco mas tarde lo podemos observar asomándonos al precipicio, antes de llegar a Falgars d´en Bas, pueblo de cuatro casas en la planicie herbada. Visitamos la iglesia, Sant Pere de Falgars y continuamos el recorrido.

Ahora nos dirigimos a la ermita de Sant Miquel de Castelló.
Antaño existió un castillo del que quedan muy pocos vestigios, la ermita sigue en pie despues de sufrir innumerables asedios y ataques a lo largo de los siglos.
El lugar donde está la ermita es espectacular, pues tiene unas vistas prodigiosas.

Alrededor de la ermita hay una amplia zona, donde vemos un numeroso grupo de excursionista que están reponiendo fuerzas, nosotros volvemos al camino, para subir a Sant Miquel, hay que seguir un sendero que en dos minutos te deja en la ermita.

Una vez pasado el Portell, vamos a la derecha por un sendero entre bosque, muy húmedo y resbaladizo, en constante bajada.

Ya abajo pasamos por otra enorme masía; Mas dels Vinyets y en pocos minutos entramos en Hostalets por la calle Vic.

Solo tenemos que andar unos metros hasta llegar a los aparcamientos que hay a la entrada del pueblo, donde hemos dejado el coche.
Este recorrido nos ha gustado mucho, por la variación que tiene y por el enclave. Vale la pena.

El Puigsacalm de fondo