viernes, 16 de octubre de 2015

Cañón del Río Lobos


11 de Octubre del 2015


Salimos desde el aparcamiento que hay frente a la Casa del Parque, cerca de Ucero. Tomamos un sendero justo al lado del parking ( letrero indicador ) que va por la senda de Gullurías.


Cuando llevamos 3 km. aproximadamente llegamos al Mirador de Gullurías, donde vemos un trocito del Cañón por primera vez, nos hacemos una idea de lo precioso que es el sitio.


Hay un punto donde dejamos el PR y tomamos un sendero casi perdido que rodea el Calvario y baja directo a la ermita.


Pasamos por el Ojo del Diablo y seguimos por un estrecho sendero hasta el balconcillo de la Ermita de San Bartolomé.


Hay buenas vistas a ambas partes del Cañón.


Desde aquí arriba, podemos ver que hay bastante gente a pesar de que está lloviznando.


El lugar donde está ubicada la Ermita y ella misma son una verdadera maravilla.




Frente a la ermita se encuentra la Gran Cueva, una enorme cavidad en la que tiene una buena vista de la Ermita y en la que la gente no para de hacer fotos.


Seguimos por el ancho y llano sendero, rodeados de unos enormes precipicios rocosos. Pasamos junto a una pared de piedra en la que hay en una de las múltiples cavidades, unos troncos a modo de panal, que ponían los frailes para extraer la rica miel.


Vamos todo el tiempo junto al Río Lobos. Durante el recorrido encontramos un sin fin de cuevas.


Este lugar es un habitad por excelencia del buitre leonado, es el rey del Cañón de Río Lobos. Los vemos posados sobre los riscos, pero cuando deja de llover, comienzan a volar sobre nosotros.


Todo el camino es muy delicioso. El río cuyas aguas parecen dormidas están plagadas de nenúfares.


Como sigue lloviznando, nos metemos en una de las múltiples cavidades a comer el bocadillo.


Llegamos a un punto en el que el río no lleva agua. Vamos dirección al Puente de los Siete Ojos.

El Puente es lo mas feo que hay en toda la ruta.
Esperábamos un puente románico por lo menos y nos encontramos con eso, en fin nada en la vida es perfecto.
Desde aquí volvemos sobre nuestros pasos.


Deja de llover y sale el sol por fin, esto le da un valor añadido. Se ve menos gente lo que se agradece, pues el inconveniente de estos sitios tan populares es que están muy concurridos y no puedes gozar de la tranquilidad y el sosiego que el lugar merece.


Pasamos de nuevo por la ermita y en lugar de subir otra vez a las Gullurías, seguimos por el sendero llano y en pocos minutos llegamos al parking Valdecea, continuamos y así llegamos al segundo aparcamiento, aquí hay un bar donde poder tomar un refrigerio.


Vadeamos el río en varias ocasiones. Pasamos Junto a un camping, totalmente vacío.


Durante todo el itinerario, hay mojones kilométricos lo que nos da en todo momento idea de lo que falta para llegar al lugar desde donde hemos partido.



Llegamos a la Casa del Parque y no hacemos la visita por falta de tiempo, ya que hemos alargado bastante la ruta, así que cogemos el coche y regresamos a Cidones, donde estamos alojados.


En la carretera hay un Mirador y no podemos evitar la tentación de parar para hacer la foto del Cañón al atardecer, desde arriba. Al final se ve el Pueblo de Ucero con su castillo en lo alto.
He bajado el track de Wikiloc, su autor: LosK2delasKumbres. Nosotros hemos alargado bastante la ruta, el track es de 14 km. pero hemos llegado hasta el Puente de los 7 ojos, que en total es casi el doble. Realmente el track no es necesario, pues el camino está perfectamente señalizado.

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