Vall d´Incles - Estanys de Juclar- Pic d´Escobes ( Andorra)

Hace un bonito día de sol. Vamos con el coche desde Soldeu hasta el Pont de la Baladosa, que dista a pena tres kilómetros, por una estrecha pero bien asfaltada pista.

Dejamos el coche en el aparcamiento y comenzamos a subir paralelos al río.

Pronto llegamos al Mirador de la Pleta, desde donde hay una magnífica vista de la Vall d´Incles.

Seguimos subiendo junto al río, hasta llegar al refugio de Juclar.

A medida que subimos el terreno se hace mas alpino, con menos vegetación y mas piedras.

El camino está muy bien señalizado.

Bordeamos el Estany Primer y pasamos entre los dos estanys de Juclar, para iniciar el ascenso al collado que da acceso a la vertiente francesa.

Llegado al collado de Juclar, giramos a la derecha y nos dirigimos al coll d´Alba, desde donde comenzaremos el ascenso al Pic d´Escobes (2781 m.).

La subida a la cima, nos lleva un buen rato, al principio vamos siguiendo hitos de piedra, pero nos despistamos y los perdemos, entonces subimos por una canal que entraña mas dificultad.

Se empieza a levantar niebla, tenemos que aligerar sino queremos que nos coja arriba.

Casi llegando a la cima hay que hacer una pequeña trepada, nada dificil aunque si muy aérea, abstenerse las personas con vértigo.

Antonia me hace la foto desde pocos metros mas abajo de la cima. Desiste de la trepada final.

Desde aquí arriba las vistas son magníficas.

Bajamos de nuevo al coll d´Alba y desde allí al de Juclar, desde donde vamos a la derecha adentrándonos en la zona francesa.

 Ahora la niebla es muy densa y apenas vemos por donde vamos. Pasamos por el Estany de Juclar y de Estagnol.

Atravesamos unas tarteras con enormes bloque de piedra y bajamos a los estanys de Fontargenta, que son enormes, pero la poca visibilidad nos impide gozar de la vista en todo su esplendor.




Después de rodear el lago, vamos al Port de Fontargenta en una subida no demasiado exigente, aunque un poco larga o es que llevamos muchas horas y estamos algo cansados.

Desde el Port todo es bajada por el valle junto al río Manegor, hasta el aparcamiento, por esta zona no hay niebla y podemos ver lo que nos rodea, que no es poco.

La ruta es preciosa, lástima que por la niebla en determinados momentos no la hemos podido disfrutar al cien por cien, no obstante lo hemos pasado genial.